lunes, 22 de noviembre de 2010

Avenida Desarrollo.~

En alguna parte
que hoy no recuerdo bien,
dijeron que caminamos por las vías del desarrollo.
Yo no sé si será una metáfora
o literalmente habrá una avenida
llamada  Desarrollo.
Y si fuera alegoría,
¿a qué se le llamará desarrollo?
Si existiera la ocasión 
de que me preguntaran a mí
(aunque no creo, por ser viejo y senil)
contestaría que desarrollo humano
sería algo así como la capacidad
de aprender a convivir los unos con los otros,
humanos y no humanos,
naturaleza y tecnología.
Pero ante este pensamiento...
heme aquí en un desequilibrio grave:
hombre conviviendo con bestia, 
máquinas en paz con la naturaleza...
No me calza dentro de esta obra improvisada
donde el humano se come al no- humano,
despedazando una vida
que cree que no existe, porque 
viene del supermercado.
Donde las máquinas se esmeran por 
acabar con los árboles,
sin importarles el oxigeno...
ellas no viven de eso.
Es un poco paradójico,
pero debo estar equivocada,
no puede ser otra cosa.
Le deben  haber puesto Desarrollo
a alguna nueva avenida del centro.

Una de las dos.~


Extrema y dura.~

Sucede que me canso de ser... hombre.
sucede que me canso de mi piel y de mi cara.

Robe

domingo, 21 de noviembre de 2010

Chinaski.~

C. BUKOWSKI

P.d.: No me odies por sentir más de lo (quizás) necesario. Puede que sea mejor que las ranas perdidas y el aire quemado de nylon y neón... Puede que sea mejor que nos convirtamos en criaturas de gestos en vez de realidad, y el matrimonio es una realidad de la vida y muy pocos de nosotros pueden soportar el matrimonio o la realidad o la vida.

Sucede que a veces la comparo con un colibrí.~

¿Cuál es el suceso
que viene después,
de que se olvida la vida?
¿Ese olvidadizo
que llega a lapidar lo
insoportablemente vivo?
Vida.
Sería fácil comprenderla
si pudiéramos llamar a este escenario
como a La Muerte.
y desde la tarima visualizar sus formas;
oír los gritos que abundan, los verdaderos;
no los que venden entre simples existencias
e ismos.
Tocarla, si fuera tangible,
conversarle, si tuviera oídos.
Lo que sea,
pero hacer algo.
Es poco ortodoxo abrazar una pureza,
y dejarla ir al segundo
quedándose perplejo,
como los humanoides
en que se han convertido.
Sería como enjaular a un colibrí por gusto
y luego cortarle las alas,
obligándolo  que enseñe a volar
a los pobres hombres...
Debe ser un poco ilusa la comparación,
pero ya debe ser el tiempo de atenerse.. 

lunes, 8 de noviembre de 2010

Antes del derrumbe.~

Cuarto con una ventana, una puerta y un escritorio.
Aveces no es necesario el catre
cuando llego a recostar mi cabeza sobre la madera
que retumba mis pensamientos
revoloteando el arco iris ya preparado,
las palabras escogidas para dibujarlas sobre la pared.
Madera insana y senil que obliga a los sentidos
presos en mi cuerpo
a exhalar una que otra bocanada de pureza tosca,
que captura el momento donde mis cabellos salvajes estropean
la puesta en escena de tantas palabras inservibles
que tarde o temprano pararán
cayendo sobre el suelo de tierra y ladrillo.
Se derrumbarán en estas 4 cuatro paredes,
pero es mi deber para con mi cordura
llegar en el momento preciso y colocar la hoja de papel
antes de que "Hombre" y "Amapola"
caigan al suelo, desapareciendo
de la composición salvadora
de los últimos minutos majareta.~

Una de las dos.